Saludos Navegantes


Hola a tod@s los lectores y navegantes.

Soy una persona que lleva ya muchos años en la búsqueda de respuestas, ¡claro! aquello de ¿quién soy?, ¿de donde venimos?, ¿hacia donde vamos? y todas esas preguntas que en nuestro recorrido en el tiempo nos hacemos todos los días.

He llegado a la conclusión que mis Pensamientos son Universales, siendo consciente de ello, iré desgranando esa Luz Cósmica que me anima a seguir mi camino, pues soy un eterno buscador de La Verdad.

Sé que el recorrido está lleno de verdades y de personas, cada uno en nuestro momento del tiempo nos impregnamos de nuestra propia verdad, aunque solo el respeto hacia los demás, nos llevará a encontrarnos a nosotros mismos, al Yo Interno, conexión espiritual con el Yo Superior, que nos hará evolucionar hacia estadios superiores de consciencia.

Querid@s compañeros de viaje, os espero en el tiempo.

Metangel.


Crónicas Existenciales


















ÍNDICE:

Introducción
Algo para el recuerdo
¿Quién soy?
¿Es Karma, Dharma o Evolución?
Luz en mis Tinieblas
El Despertar
El Legado Cósmico
Otra vez Juntos
¿Quiénes son Ellos?
Viajes en el Tiempo
Revelaciones
Creacionismo o Evolución
Reflexiones en el Tiempo
Epílogo


Introducción


Dicen que no hay dos sin tres, parece ser que las trilogías están de moda, aunque si este va a ser mi tercer ensayo en literatura, no siendo de la misma saga, pues los anteriores solo tienen algún punto de inflexión en sus relatos, es lógico que alguna conexión tenga que haber en todos ellos, pues las reflexiones, las búsquedas, mis contactos con Ellos siguen siendo el aliño de una salsa que quiero seguir degustando.


En estas Crónicas Existenciales, quiero poner en la luz algunos de los episodios más trascendentales de mi existencia, hechos crudos y reales que ocurrieron en este mi tiempo, que aunque ya ha pasado bastante de él, sigue resonando en mi interior como si hubiera ocurrido ayer mismo.


Espero y deseo que las palabras fluyan y refluyan, espero que la coherencia de unos hechos anclados en el tiempo un tanto oscuro de mi vida, puedan emerger de las profundidades de mi mente y hacerlos comprensibles para poder así compartir con todos vosotros, algo, que como digo, resuena en lo más profundo de mi ser, de mi mente subconsciente y que ahora es el momento de hacer totalmente consciente.


Para ello tengo que hacer un viaje en el tiempo, lástima que no tenga una máquina para ello, sin embargo hay otras maneras de viajar en el tiempo y yo voy a tratar de utilizar esas herramientas con las cuales me está permitido hacerlo con ciertas garantías y sin ningún tipo de riesgo.


Siento que mi vida ha sido un tanto especial, pues las cosas que me han ocurrido no son las habituales, por lo menos en mi entorno y en mis amigos y familiares, como digo, no he presenciado unos hechos que al día de hoy no sé bien como tildarlos, aunque también es cierto que ya he puesto mucha luz en la mayoría de ellos.


No voy a ser presuntuoso y tratar de convencer que soy al único que le pasan cosas extrañas, imagino que habrá cientos de casos más difíciles de asimilar, pero esta es mi historia y cuando le pasa a uno, pues tienes dos caminos, o lo ignoras, o lo analizas y abres una vía de búsqueda para tratar de asimilar lo que a primera vista es incomprensible.


Y es que haber estado en las puertas del otro mundo en más de una ocasión, pues si reflexionas un tanto, da mucho que pensar.


Ya de pequeño, cinco o seis años, cuando vivíamos en Santa Cruz de Pinares, en mi Ávila maravillosa, tuve una bronconeumonía bastante grave, a mi pobre Madre no le daba más que disgustos, pues yo era un trasto de cuidado y si no era por enfermedad era por algún incidente, el caso es que Angelito era todo menos lo del nombre.


También en el pueblo y con siete u ocho años, un verano y en la orilla de uno de los riachuelos, donde las zarzas dan las exquisitas zarzamoras, las comí a medio día, cuando hacía más calor, os podéis imaginar el resultado por la tarde, un cólico de caballo que me tuvo en cama con mucha fiebre y delirando como un poseso.


En aquellos años y hasta que nos trasladamos a vivir a Madrid, yo tenía ocho años, los disgustos a mis padres eran continuos, un día casi me secciono un dedo, otro día le saqué la pólvora a un cohete de ferias y lo puse en una piedra, me senté de frente y pensé, si le atizo al montón de pólvora con una buena piedra… ¿qué pasará?, cogí un buen pedrusco, lo icé con las dos manos por encima de mi cabeza y zas.


Joder que ideas tenía el angelito, casi me quedo ciego y lelo, no me atrevía a ir a casa y estuve deambulando por los alrededores del pueblo hasta por la noche que ya me encontraba mejor, ¡claro que… no sé que fue peor!


Otro día jugando a las “pedreas” en el campo, ¡no a la lotería no!, a tirarnos piedras los unos a los otros, juego totalmente enriquecedor, pues te ayuda a saber las debilidades del contrario o su destreza con los “cantos”.


Volví la cabeza y apenas tuve tiempo de más, aunque la vi venir, fue tan rápido como contundente, se estrelló en toda mi testa, joer que golpe, aunque no me caí al suelo, quedé conmocionado del total, casi se me fue la visión, no oía nada, la cabeza me daba vueltas y ya tuve que sentarme, el que estuvo tan certero llegó y me atendió como un buen amigo que era, no hubo discusiones ni reproches, fue un accidente pues todo era un juego… que podía haberme costado caro.


Recuerdo ya en Madrid otro soberano golpe en la cabeza, estábamos jugando en la calle, unos doce años, había un camión de aquellas épocas, bastante destartalado, nos subíamos y bajábamos de la caja de carga, la parte de atrás tenía una trampilla de hierro y como era muy alta decidimos los amigos que entonces estábamos allí, quitar los amarres y soltarla.


Y otra vez el Angelito por medio, es que me las llevaba todas, ¿en donde?, ¡que preguntas!, en toda la cabeza, sentí como si un martillo gigante me hubiera dado un martillazo para clavarme en el suelo, otra vez aquella sensación ya vivida y otra vez recordada, no oyes nada, un embotamiento te engulle y parece que todo se desvanece y adquiere una sensación de ingravidez y falta de conexión con este mundo.


Con quince años ayudaba a mi padre en su taller de tapicería de muebles, cargábamos el coche y hacíamos el reparto, en aquellos años Madrid era otra cosa, mi padre me enseñó a conducir y yo le ayudaba en las tareas dejándome el vehículo de vez en cuando.


Fue una tarde de invierno y con lluvia, habíamos hecho una entrega y nos habíamos dejado la factura en el taller, “yo me acerco papá”, cogí las llaves del coche y raudo quise llegar al taller, no sé lo que ocurrió pero de repente el vehículo patinó y fui por medio de la calle dando bandazos de un lado a otro, aquello no se paraba, se me hizo eterno, fueron mas de cien metros y no me di contra nadie y suerte que en dirección contraria no pasaba ni un alma, que raro pensé cuando salí del coche y vi donde me encontraba y en dirección opuesta a donde circulaba.


Nadie en la calle, no había nadie y eran las ocho de la noche, ningún vehículo circulando, sin más volví con la factura y por supuesto que no dije nada.


Con dieciocho años y con mi moto me sentía libre, conste que nunca fui un loco irresponsable, conducía y manejaba la máquina muy bien y como digo era bastante cauto, pero dos accidentes me llevaron al suelo, afortunadamente sin un rasguño, cosa difícil pues fueron muy aparatosos, no creyendo los que me atendieron que no me hubiera pasado nada.


Lo de mi desconexión mental le dedico un amplio capítulo, pues es quizá una de las experiencias más extrañas, bueno, no es quizá, es sin duda lo más sobrecogedora de mis raras vivencias en esta mi vida física.


Ya metido en los cincuenta años he tenido otro capítulo difícil y extraño, parece ser que ahora soy “alérgico asmático” y tengo que tener mucho cuidado con los catarros y los enfriamientos, pues tengo los bronquios muy delicados, esto viene de aquella bronconeumonía que anteriormente citaba.


Como digo, era domingo y habíamos quedado con unos buenos amigos en ir a visitarlos fuera de Madrid.


Y como de casi todo escribo, pues en la tranquilidad del día después a estos aconteceres, escribí unas palabras sobre lo sucedido y que a continuación expongo, fue un día especial como todos aquellos en los que fui partícipe de unos hechos que podían haber cambiado la historia de este caminante y eterno buscador...


  • Un Día Especial
Se presentaba un fin de semana, tanto por esperado como por soleado, bueno, bueno de verdad.


Habíamos quedado Julia y yo en ir a la casa de unos amigos bastante especiales, lo de especial es por esas cosas nuestras, sí, nuestras vivencias, que a veces compartidas con amigos de verdad, pues hace que esos encuentros, aunque de tarde en tarde,  sean un poco mágicos y un tanto “especiales”.

Se había demorado ya la cita en anteriores ocasiones y por razones diversas, hacia más de un año que no nos veíamos y por fin este domingo iríamos a ver su nueva casa. El viernes ultimamos detalles, pues aunque no viven muy lejos, están en una población al sur de Madrid a unos sesenta kilómetros de distancia… “el domingo nos vemos, ¿de acuerdo?, llamar cuando estéis de camino, besotes, chao, adiós”.

Y el domingo por la mañana reciben una llamada de Julia… “Hola Juli, ¿por donde estáis?

Y la vida tiene estos días tan especiales, yo pasé una mala noche sin parar de toser, un poco de catarro una pizca de fiebre… no, no fue una buena noche. Me levanté mal, sí del revés, como se suele decir, no podía respirar bien, pero siempre se pasa después de desayunar, pero queridos hoy era un día especial y ya pensaba yo en nuestra cita y traté de hacerme el fuerte y por supuesto no le dije nada a Julia… “nada esto no es nada y aunque esté todo el día tosiendo tendré que aguantar, pensé”.

Julia ultimaba a los gatitos y les dejaba preparados para todo el día, había pasado poco más de una hora y yo tosiendo y sin decir ni pío, a cada momento me encontraba peor, sentía un gran peso en el pecho, al mínimo esfuerzo me faltaba el aire en los pulmones, subí a nuestra habitación, dos tramos de escalera y llegué exhausto, sin dudarlo cogí el Ventolín, sí, ese inhalador que usan los asmáticos, parece que me alivió y pensé, pues hoy me lo llevo y si me da una fatiga, pues un par de chutes y como nuevo.

Pero hoy era un día especial, y al rato me dio un ataque de tos que no quiero ni recordar, tos seca, desgarrante, horrible, todavía me duelen las costillas y la espalda de los esfuerzos. Y entonces ocurrió, la tos cada vez más fuerte y ahora me faltaba el aire, ¡como puede ser!, siempre que usaba el inhalador me mantenía sin problemas abiertas las vías respiratorias, ¿qué pasaba esta vez?

La sensación era muy desagradable, quería respirar y el aire no pasaba a mis pulmones, era como si no tuviera nariz, la boca abierta cuan pez jadeante fuera del agua, los bronquios estaban cerrados y un pitido fatídico me acompañaba cada vez que intentaba coger aire por la boca y a cada momento menos oxigeno en los pulmones. Una sudoración fría y fantasmal me cubrió todo el cuerpo y como pude llamé a Julia, apenas podía articular palabra y el susto fue de campeonato cuando mi querida llegó a la habitación… nervios, más sofoco y mucha tensión.

Hay que llamar a un médico, a una ambulancia… claro buscar una solución… querida, balbuceé… nos vamos al hospital y se acabó.

Minutos interminables, vestirse un sofocón, el aire te falta los pensamientos no, llega un momento de máxima tensión, el aire te falta pero la vida aún no, es como un espasmo, si te quedas ahora es la perdición y Julia me habla pero apenas soy yo… tumbado estarás mejor, no hablo, no puedo, solo jadeo, quiero aire, solo respirar, si me tumbo no me levanto, a la cama ni hablar, pienso, solo pienso… solo en respirar, abro la ventana y pido al aire que se deje embaucar, solo una brizna, un poco de aliento, un poco… solo un poco y nada más. La tensión baja una décima, me visto y al coche, mi querida me llevará.

Ella tiene buen nervio y me quiere de verdad, aunque preocupada ya me dejo llevar, el hospital me espera, diez minutos y ya está. Pero hoy era un día especial, diez minutos y diez mil jadeos y el tan preciado aire que no me quería entrar, darme la vida y dejarme en paz, cinco horas en URGENCIAS y dos minutos para volver a respirar. Y el domingo por la mañana, los amigos de la cita reciben una llamada de Julia, “Hola Juli ¿por donde estáis?

Hoy era un día especial, en silla de ruedas y con toda rapidez, te meten en la sala, te falta el aire y todos lo ven, todo un equipo, por lo menos eran diez, preguntaban y preguntaban y yo solo quería beber el oxigeno que me faltaba, la fuente de mi poder, solo dos minutos muy largos parecieron ser. ¿Cómo te llamas?, Ángel, apenas les hice ver, pinchazos en los brazos… esto te va a doler, ¡no! les dije y a mi pecho señalé, jadeando e implorando la mascarilla del renacer, todo eran voces, prisas y buen hacer, “Aerosol con Ventolín y oxígeno después”, dos pinchazos en vena, más oxígeno por doquier.

Dos minutos, solo dos minutos, la mascara puesta y la vida otra vez, los pulmones llenos y por supuesto lo tenía que creer… “respira tranquilo, ya pasó”, ¿quién me susurró?, que sensación, que maravilla, miré a mi alrededor, había mucha gente y esa sensación, allí había alguien que no era del equipo médico de atención, sería mi mente o tal vez la confusión de vivir un estado límite, unos momentos de máxima tensión.

Sí, ha sido un día un tanto especial, cinco horas con oxígeno en el hospital y nuestros amigos que por la mañana reciben la llamada de Julia… “Hola Juli, ¿por donde estáis?”. Queridos vivir todos los días como si fuera el último, no dejéis nada en los armarios para mañana, estrenar sentimientos, disfrutar del día a día compartiendo vivencias, pues no sabemos cuando llegará un día especial y que nos falte el aire de la vida, de nuestra querida y frágil vida física.

Hoy es lunes, hoy puedo respirar, hoy sigo teniendo vida, seguro que será un día muy especial.



19 de noviembre de 2.006



Estos son los hechos queridos, ahora en la lejanía del tiempo piensas y reflexionas, ¿quién ha estado siempre a mi lado?, ¿ha sido pura casualidad que no ocurriera nada más grave?, estas son mis cosas, pero hay otras muchas más, pues si pongo la mente a trabajar, me vienen otras situaciones a las que no puedo dar solución, pero que un día en el tiempo las expuse y encontré los interlocutores válidos para que me dieran una explicación convincente.



Amigos, hermanos en el recorrido y en el camino de evolución, siento que los acontecimientos una vez más van a ser un tanto guiados por los que ya sabéis que son mis compañeros de viaje, a Ellos, como genéricamente les llamo, sí mis Hermanos Mayores, los que hayáis leído Metatierra sabéis de lo que estoy hablando, como digo, tengo la certeza de que alguno de esos Guías, están en contacto permanente con mi cuerpo y con mente para que ahora fluyan esos sentimientos y esos acontecimientos de mi andadura, para así poder realizar el nuevo compendio al que llamo ya Crónicas Existenciales.

Algo para el Recuerdo

Todos tenemos recuerdos en nuestra mente, aunque el porcentaje de dichos acontecimientos de un pasado no muy lejano, quedan enturbiados y olvidados por alguna razón todavía desconocida.

La Mente y por ende el cerebro siguen siendo una gran incógnita en nuestros aparentes y logrados éxitos en el avance de las tecnologías y la ciencia.

Una ciencia oficial que todavía se encuentra en pañales en muchos de los aspectos que debieran estar ya más que logrados, si en vez de tanta inversión en la maquinaria de la guerra, los seres humanos se hubieran dedicado al estudio el cuerpo humano, de la materia, de la energía y de la naturaleza de un planeta tan rico, exuberante y diverso como es nuestra querida y aquejada Tierra.

Y para hacer que surjan esos recuerdos no podemos acudir a la ciencia oficial, al médico de turno, pues no existe ese conocimiento para hacer surgir algunos recuerdos que están completamente borrados en nuestra mente, ¿o tal vez no estén del todo olvidados?

Hoy día hay algunas personas que dedican su tiempo a tratar de comprender este paradigma, hay personas que tienen la mente abierta a otras posibilidades, hay personas que han conseguido instaurar una técnica basada en un constante estudio de la mente y de sus posibilidades.

Y estas personas son capaces de bucear en lo más profundo de nuestras mentes, llegando a rincones perpetuos y aparentemente sellados para hacer surgir con bastante nitidez, esos pensamientos y esas vivencias cuasi olvidadas por nuestra mente consciente.

Me preguntareis, ¿es necesario para poder escribir algunos episodios de nuestra vida acudir a ciertas técnicas de sofronización o de relajación?

¡Evidentemente claro que no!, lo que ocurre es que en mi caso y sobre la vivencia que me ocurrió, donde estuve dos meses desconectado de la aparente realidad cotidiana de mi vida, por una causa hasta hace algún tiempo desconocida, como digo, en mi caso me lleva a considerar optar por medios atípicos, el tratar de hacer conscientes unos hechos acaecidos en el verano de 1.982.

Y después de tantos años, el pensar una y otra vez sobre aquel acontecimiento, el cual me tuvo desconectado de la realidad un par de meses y de entrar en coma profundo, dándome por desahuciado los médicos de turno, es ahora y en este tiempo cuando sale a la luz el por qué de aquellos días tan negros y tristes en mi andadura en evolución.

Sin embargo no he tenido la osadía de afrontar el hecho de enfrentarme directamente con un especialista de los anteriormente citados, solo una breve incursión con un Sofrólogo de cierto prestigio, que para un programa de televisión preparaba personas.

No era el marco adecuado, pues las prisas y demasiadas personas para intentar “dormir” y elegir a los más predispuestos, como digo, no era el sitio idóneo para hacer una regresión y profundizar en mi subconsciente.

Por otra parte, el acudir a consultas privadas era todo un lujo que yo no podía permitirme y en todo caso no estaba acorde con mis pensamientos.

De una manera o de otra, el caso es que hasta hoy no he tratado de ir por esos derroteros, sin embargo he ido por otros un tanto más peculiares y difíciles de comprender, sobre todo para el común de los mortales, aunque para mi sea una cosa totalmente natural y sencilla, me refiero a entablar conversación telepática con Ellos, mis Hermanos Mayores.

Bien, supongo que para el que lea mis escritos por primera vez le resultará un tanto extraño y quizás me tilde de loco fantasioso, no os preocupéis por nada, podéis pensar lo que os venga en gana, ya pasé por ciertos conflictos con Metatierra y uno está ya curado de espantos.

Mi realidad es que he pasado por algunos conflictos existenciales y mi mente no se resigna a dejar en el olvido esos acontecimientos, que ciertamente cambiaron el rumbo de mi vida, no teniendo aún todas las claves para saber por qué ocurrió y por qué a mí.

Me refiero a todo el entramado de situaciones en una simple persona y en su camino evolutivo, que en un momento en el tiempo se encontró en contacto con unas personas que no eran de este mundo, aunque tenían mucho que ver con la globalidad de una Tierra que estaba desembarcando en un nuevo tiempo para dar paso a una Nueva Generación.

¿Quien Soy?

Lo que  conlleva a preguntarme constantemente ¿quién soy yo?, paradoja inequívoca para saber el por qué me ocurrió a mi y tal vez el por qué de mi existencia.

Y las preguntas siguen resonando en mi mente y las respuestas llegan con cuenta gotas, al menos muchas de ellas cambiaron ciertos rumbos de mi andadura en este mi espacio tiempo.

Y te sigues preguntando, pues los acontecimientos en el día a día no son los habituales de cualquier persona, al menos esa es la impresión que desde uno mismo se tiene, no quiero hablar ahora de momentos delicados, no toca, sin embargo puesta la balanza en el tiempo, asumes que falta algo en el puzzle de la vida y no se concreta mi realidad con la realidad.

Quizá sea un espejismo de mi mente y tenga un concepto equivocado de las cosas, todo puede ser, la Mente es la gran creadora y por supuesto la gran destructora, si pasas el límite despídete de la coherencia y del bien estar del día a día.

La cuestión es que yo no me encuentro en conflicto interno, estoy tranquilo y siento que las cosas van por buen camino, sé lo que es estar enfermo y confundido, ya pasé una etapa turbia y oscura de mi mente, estando encerrado en vida sin poder emerger a la realidad, aunque solo fuera por dos meses.

Me pasó a mi, y ahora después de tanto tiempo es como si hubiera tenido otra vida, la verdad es como ahora lo siento, pues mi vida ahora no tiene nada que ver con la de mi anterior pareja, sintiendo que todos los acontecimientos pasados en aquella existencia, tuvieron alguna razón de ser, para llegar a una nueva etapa de más conocimiento y por supuesto de más tranquilidad.

Y como digo, ahora siento saber quien soy, el problema fue cuando no sabía quien era ni que papel desempeñaba en la pequeña historia de mi vida.

Fueron muchas las señales para cambiar el rumbo de mis acontecimientos, pero yo estaba un tanto “ciego y sordo”, Ellos seguían a mi lado y aunque los tuve muy cerca, no supe comprender la realidad que me intentaban demostrar.

Cierto es que les vi en innumerables ocasiones, pues la temática OVNI y los ETes, estaban constantemente en mi mente, seguimiento de muchas noticias, lectura de muchos libros y un apasionamiento que hasta bastantes años después no tuve la ocasión de definir y descubrir la grandeza de aquella realidad.

Y poco a poco en mi mente fueron sembrando la duda de aquella posible existencia de los llamados extraterrestres, de sus fantásticas e inexplicables naves y de sus mensajes, que ya estaban siendo extrapolados a ciertos personajes para su divulgación en el planeta Tierra.

Yo era un joven idealista, sí de ideas muy propias, no estaba conforme con casi nada de lo oficialmente establecido ni de lo políticamente correcto.

Siempre he pensado en los demás, me preocupan las guerras y el hambre, las grandes instituciones religiosas, los dictadorzuelos y los grandes poderes mediáticos, que unido a la prepotencia de la gran nación americana y su intervencionismo por todo el planeta, con la multinacionales por un lado y los conflictos bélicos por otro, pues eso, que siempre pensando en un mundo más justo y solidario.

Y no es que fuera el único, pues la concienciación de una gran parte de la población mundial, llevó a romper ciertas barreras con el poder establecido, el movimiento hippie, el mayo francés, los claveles en Portugal, el muro de Berlín y tantos iconos que ahora en este tiempo se me antojan tan lejanos como difíciles de repetirse.

Ahora estamos en las sociedades del bien estar, donde nuestros hijos y nosotros mismos tenemos de todo, bueno de casi todo y claro, siento que los jóvenes de ahora no tienen los conflictos que teníamos hace treinta o cuarenta años.

Y es que la telefonía móvil, entre otros inventos, nos ha ganado la partida a una sociedad convulsa, ¿os imagináis el poder de convocatoria en nuestra lucha de juventud con un “arma” de ese alcance?

Ahora lo utilizan para convocar “botellones”, ¡es que es de risa!, bueno la verdad es que es patético, pues siento que no hay valores, que no hay lucha por el bien estar de los demás, que lo que prima es el puñetero teléfono de última generación y estar todo el día poniendo “sms” y bajando canciones a tutiplén, lo que supone un gasto innecesario en cosas totalmente inútiles.

Y la televisión haciendo honor a su alienamiento virtual, vendiendo cientos de millones en loterías mediáticas y solo por el “sms” de turno, claro que ahora y en plena crisis económica, pues a bombardear al consumidor con mensajes infectos y con premios realmente bochornosos y poco éticos.

Bien queridos, algún desahogo debía de tener al hilo de los acontecimientos narrados, pero sigue siendo esa realidad a la cual me refería anteriormente, yo no encajo en ella y por supuesto que estoy abierto a las nuevas tecnologías, pues soy de los primeros en utilizarlas.

Lo que ocurre es que no estoy de acuerdo con la balanza que nos quieren imponer los de siempre, es una aberración la cantidad de miles de millones que se despilfarran en acontecimientos cotidianos que no nos llevan a ninguna parte.

Solo y por desgracia pasan a engrosar las cuentas de los cuatro personajes de siempre, mientras el común de los mortales de las nuevas sociedades de consumo, se limitan a si mismos, llorando a continuación por que no les llega para la puñetera hipoteca.

¡Sí! vamos a cambiar de tercio, pues siento que la sangre se me calienta por momentos, así que deseo continuar con el ¿Quién soy?


Karma, Dharma o Evolución

Y en estas reflexiones existenciales uno se pregunta si lo que Es (Soy), siempre ha Sido y siempre lo Será, si ha tenido principio y si tendrá un final, por supuesto  El Ser, la persona, tu y yo.

La Metafísica moderna habla del Yo Soy, el Ser como parte del Todo o Dios, concepto que tiene muchos seguidores de Nueva Era y que otros siguen profundizando con nuevos apoyos logísticos, pues ahora hay todo un pensamiento mediático de quien son los nuevos Dioses y sus Elegidos.

No hay nada más que entrar en la Red Internet y nos haremos una idea de ello, Maestros Ascendidos y portavoces cualificados para transmitir cientos de mensajes a los posibles adeptos que rayan los sectarismos de ciertas creencias religiosas, donde prima el convencimiento de sus seguidores por la fe de los nuevos y canalizados profetas.

Y es que hay mucho engaño por todo el mundo, ¡claro!, alguno pensareis que de que estoy hablando si yo mismo afirmo estar en contacto con seres de otro mundo.

Bien, hay una pequeña diferencia, yo no busco adeptos, no quiero aprovecharme de la debilidad espiritual de mis congeneres como lo hacen la multitud de sectas y grupos de los llamados de Nueva Era, salvando algunas excepciones.

Y siguiendo con ¿quién soy?, me lleva al apartado en donde nos encontramos, ¿es Karma, es Dharma o es pura y llana Evolución nuestro Ser?

Reconozco que hay para todos los gustos, dependiendo de nuestras vivencias y creencias, optaremos por una u otra cosa para definirnos, para encontrarnos o simplemente para quedarnos tranquilos con nosotros mismos.

La verdad es que se han perdido muchas referencias en el apartado de las religiones, donde multitud de personas buscan al Dios de turno por otros derroteros y hoy día con tanta información al alcance de nuestras manos, pues tenemos un servicio a la carta para decantarnos por aquel pensamiento que más nos llene.

Si las cosas nos van mal, si tenemos que vivir con alguna carga pesada en nuestro día a día, es fácil escuchar el ¿que habré hecho yo en otras vidas para estar pagando este precio en la actual?

Eso es el llamado Karma, concepto de fuera de nuestras fronteras, de nuestros pensamientos occidentales, pero que hemos acogido como nuestro para definir lo ciertamente inexplicable de nuestras vivencias.


Y llegamos al concepto Evolución, veamos que dice lo oficial sobre el término, por un lado tenemos la Evolución Biológica que es el proceso continuo de transformación de las especies.

La Evolución Humana que es el proceso de transformación de la especie humana desde sus ancestros hasta el estado actual.

Y lo importante siento yo, es que tengamos esas reflexiones y nos detengamos unos momentos para tratar de encontrarnos a nosotros mismos.

Lo de menos serán los nombres, pues al igual que las religiones, para mi lo de menos es si se llama de una manera o de otra a Dios, Alá, Krishna, etc., pues eso dependerá del lugar donde nos encontremos de nuestro querido planeta Tierra.

Volviendo al pensamiento evolutivo, karma o dharma, para mi son conceptos suficientes para definir algo que está en un nivel bastante superior de entendimiento y de conocimiento, que sin duda los que estamos en esa constante búsqueda de respuestas, como digo, es un encontrar casi todos los días “algo valido” para seguir en la brecha, en esa expansión de conciencia que seguramente nos pueda llevar a la conexión con La Fuente, con El Creador, Cosmos, etc.

Y mientras seguimos con nuestros pensamientos por los derroteros de una evolución en un planeta todavía muy primitivo y que no es capaz de salir del ostracismo, de las guerras, del hambre, de unas ansias de poder de unos pocos, que están llevando a la mayoría a un camino sin retorno.

Y mientras ello acontece, como digo, ¿podemos definir al ser humano?, ¿quién es capaz de definir a una parte del Todo Holográmico, también llamado Cosmos o Dios?

Sin duda que habrá que seguir esa búsqueda de respuestas y tratar de racionalizar con un grado superior de mentalidad, lo que llevamos impregnado en lo más profundo de todos nosotros.

Pues es evidente que la mayoría de las personas en un momento dado y debido sobre todo a nuestro grado de cultura, nuestro concepto religioso, nuestras creencias y también según nuestra particular idiosincrasia, como digo, todos en un momento dado trataremos de definir las distintas manifestaciones del Ser.

Y claro no es lo mismo que una persona tenga conocimientos científicos, sea matemático, físico, biólogo, médico, periodista, sociólogo, que una persona sin una base académica para tratar de definir qué es el ser humano, de donde viene, que ha venido a hacer a este mundo y hacia donde se tiene que encaminar como civilización y como especie.

Un médico nos hará un planteamiento sobre todo físico del ser humano, siendo para el un conjunto de células en una inusitada armonía con un funcionamiento muy complejo, un tanto enigmático, pero funcionalmente perfecto aunque biológicamente en degradación constante.

Un religioso nos haría otro planteamiento, uniendo al ser físico el alma y el espíritu, siendo estos los responsables de la vida del cuerpo físico y a la vez la conexión con el Dios de turno, dependiendo de la religión que estemos hablando.

Un metafísico nos daría otro concepto muy distinto del ser humano, pues éstas personas van mas allá de los conceptos establecidos oficialmente entrando en las leyes y teorías científicas, conmutándolas con esos otros conocimientos de nuestros ancestros y esas leyes herméticas que a veces no lo son tanto, pensando en un ser humano adimensional con unas capacidades humanas pero también divinas, “como parte de”, siendo en definitiva algo más de lo que promueve la religión y mucho más de lo que piensa la clase científica.

¿Y como nos definiría un señor de a pie, una persona buena y honrada que trabaja, que tiene una familia y por supuesto unas inquietudes de búsqueda de su realidad y de todo lo que le rodea?, pregunto, ¿cómo definiría ésta persona al ser humano?

Sin duda trataría de poner encima de la mesa todos esos conocimientos que dicen tener y saber los más estudiosos, pondría también sobre la mesa todo su bagaje y su búsqueda de tantos y tantos libros, teorías, foros y charlas seudo-intelectuales que hubiera tenido a lo largo de la vida y buenamente aportaría sus conclusiones que seguramente no se parecerían en lo más mínimo con todo lo anteriormente expuesto.

Y luego estamos otras personas que también vamos buscando el conocimiento y la verdad, aunque por otros caminos, unos caminos ciertamente todavía delicados pero que muchas personas han iniciado al margen de soportar burlas de todo tipo, pues el pretender hoy día que uno hable y tenga unos amigos fuera de nuestra gran casa, ¡sí!, La Tierra, como digo, hoy día suena todavía un poco rarito.

Menos mal que el tiempo lo cura todo y en estos temas además siempre surge alguna prueba, que los más allegados del entorno reciben con sorpresa primero y después con cierta gratitud, pensando en que ya no estemos tan tontos como en un principio parecía.

Y así las cosas, poco a poco la semilla, la normalidad se adueña de nuestras vidas en esa aparente anormalidad de hechos, conocimientos y amigos de las estrellas.

Entonces, ¿cómo definimos nosotros al ser humano?, pues sencillamente y después de que nuestros hermanos de las estrellas nos hayan dado su definición, esta nos ha parecido tan coherente y racional, que después de tanta búsqueda, es con lo que nos hemos quedado pues estamos tan convencidos de esa evidencia que la tomaremos como realmente nuestra.

Ser Humano: chispa de creación que forma parte de la Entidad Superior, Cosmos, Fuente, Dios, cien por cien de una andadura en el tiempo que cuando se cuantifica queda dividido en dos mitades para su evolución individual.

Somos una dualidad polar como todo lo que se genera en el Universo, materia y energía, luz y oscuridad, positivo y negativo, mujer y hombre igual a ser humano, cincuenta por ciento cada uno de un espíritu, que volverá a fundirse en uno solo cuando acabe su andadura, su individualidad, su evolución en esa porción de tiempo cuantificado, volviendo a ser energía de creación.

Y como ya sabemos, luego están otras muchas personas, que digo muchas, ¡muchísimas!, a las que les da lo mismo tanto los temas religiosos, profundos, metafísicos, nuevas realidades, expansión de conciencia, nuevos paradigmas etc., etc., etc.  .. .

Al final pregunto, ¿cómo se encuentra la balanza?, ¿cómo están de equilibradas las fuerzas Universales en nuestro pequeño grano de arena cósmico?, no hay que pensar mucho para ver como están las cosas por la Tierra, los impulsos nos deben haber llegado ya a todos, la realidad la tenemos frente por frente y no debiéramos poner “situación de Avestruz”, no queriendo saber nada de los problemas que de alguna manera nos afectan a todos.

¿Es eso un ser humano?, ¿somos así las personas o tal vez seamos algo más?, aparentemente todos somos solidarios, aparentemente nadie es racista, aparentemente nadie es un asesino, aparentemente todos somos buenas personas.

¿Entonces que es lo que ocurre?, ¿qué es lo que está fallando?, ¿será que todo no es más que una apariencia?, ¿será que el fin justifica los medios?, ¿será tal vez que no estamos evolucionados?, ¿será la Ley del Karma?, ¿será quizá que...?

Bien, todo eso y mucho más parece ser que somos las personas, los seres humanos y bien digo mucho más, por que también somos seres divinos, pues al formar parte de ese Todo o Cosmos, también Dios, formamos parte queramos o no de ese gran plan divino de creación con todo lo que ello lleva consigo.

Y seamos o no conscientes y dependiendo de nuestra evolución individual, será así como comprendamos los diferentes estadios de nuestro momento en esa cuantificación del tiempo que nos ha sido entregada por el Creador.

Si somos conscientes seremos solidarios, si somos conscientes no seremos racistas, si somos conscientes no seremos asesinos, si somos conscientes seremos buenas personas, si somos conscientes nos respetaremos todos, si somos conscientes es que estamos bien evolucionados.

¡Sí amigos!, si todos fuéramos conscientes el amor sería la constante en nuestras vidas y seriamos felices, se acabaría lo tuyo y lo mío, para compartir todo para todos, se romperían todos los esquemas de las viejas estructuras encontrándonos en un mundo de luz y vibración como el que ya nos corresponde.

Queridos lectores, los moradores de las estrellas están con nosotros, aprovechemos las pocas oportunidades que nos quedan, llevemos entre todos la nave Tierra a la vibración que le corresponde, estamos en la mejor zona energética para lograrlo, han sido muchos miles de años desde la primera andadura de ésta humanidad y muchos los millones de años desde que nuestro planeta iniciara su momento en el tiempo.

Ahora es nuestro tiempo, tenemos la oportunidad de revertir al Cosmos el regalo que un día nos ofreció, seamos conscientes y hagamos que ese cántico de amor profundo nos lleve de una vez por todas con nuestros hermanos de las Estrellas.

Sí amigos, la mente, nuestra mente es capaz de exponer y ejecutar todos esos sentimientos y muchos más, solo el deseo de encontrarnos bien, solo el deseo de hacer realidad lo que siempre nos han puesto como imposible, como digo, será la única manera que nuestros pensamientos lleguen un día a ser una verdadera, apacible, sosegada y armoniosa Realidad.

Y después de estas diligentes reflexiones, voy a entrar en  los relatos referentes a esa época un tanto oscura, una etapa bastante dura y compleja, la cual supuso un punto y aparte en la evolución de este humilde personaje que os está contando sus vivencias, sus pensamientos y también sus sentimientos.

Como siempre digo es mi verdad, no sé si será La Verdad, pero lo que si tengo muy claro es que mi parte, la que a mi me corresponde es llana y sincera, sin tapujos ni escondrijos, sin maldad, sin rencor.

No sé si ha quedado claro mi pensamiento sobre lo anteriormente expuesto, desde el ¿quien soy? pasando por el karma, dharma y la evolución, imagino que cada cual tendrá su visión de las cosas y eso es lo más importante, la reflexión y los pensamientos, después vendrán las acciones, “acción y reacción en las cosas”.

Lo único que yo promulgo es que todos vayamos por la senda del respeto, esa es una de mis máximas, ya os he dicho que lo de los nombres en las deidades y en otros conceptos, es lo que menos importa, está claro que si dentro de todos y cada uno de nuestros pensamientos el brote es el respeto hacia los demás, habremos ganado la batalla de nuestra evolución en un mundo tan difícil como bello.

Ahora pongamos luz en mis tinieblas y sigamos desgranando mi verdad, tengo que poner negro sobre blanco una historia muy triste pero real, no creo que me tiemble el pulso, aunque hay recuerdos dolorosos, siento que ya están totalmente superados.

Y aunque no hace mucho tiempo que se cerró totalmente ese ciclo, una vida que fue compartida por otra mujer, como ya he dicho, siento que esas vivencias están ya superadas y pertenecen a otro tiempo que ya no es mi tiempo.